Semana Santa...

 Hola a todos!!

Aprovechando que es Semana Santa, me gustaría hablar de un debate social, ético y moral que tiene lugar en estos días.

Cierto es que existen muchas religiones y muchas creencias totalmente opuestas y diferenciadas. En este caso, la Iglesia católica y, por tanto, los cristianos católicos se preparan durante todo el año para lucir a su manera su fe y su amor por sus seres superiores (Dios y la Virgen María). Seguro que todos sabéis de lo que estoy hablando, las procesiones. 

                                                                                                                                                                    

 Fuente:  Viaggio Andalusia (imagen libre)

Pues bien, existen otro tipo de creencias religiosas que ven este hecho como una idolatría, algo no aceptado por Dios. ¿Por qué? Pues porque consideran que están adorando una figura y, según la Biblia, no podrás adorar a nadie que no sea Dios y menos a un objeto.

Digo yo, ¿no será más lógico pensar que no adoran a las figuras sino a lo que ellas representan?.

Independientemente de las creencias que cada uno de nosotros tengamos, todas ellas merecen respeto. Al igual que no podemos obligar a alguien a que crea, tampoco las personas consideradas ateas pueden reírse o tratar como locos a aquellos que se consideran creyentes o cristianos.

Estos debates ( bautizarse sin consentimiento propio o bautizarse de mayor, creer en la virgen o no, celebrar Semana Santa o no...) son creados debido a la diversidad religiosa. Es decir, cada religión a modificado la palabra de Dios conforme a sus beneficios, y permitirme ser un poco dura y crítica con esto.

Puedes creer en una religión concreta porque te han educado en ella y porque consideras que de todas las que conoces es la que más te llena o consideras que es la más coherente. Ahora bien, puedes creer en Dios pero no en el hombre, no en la Iglesia. Por lo tanto, la palabra de Dios (la Biblia) es verdadera pero hay que saber interpretarla, y aquí viene el debate. Cada creencia, cada religión coinciden en muchas cosas pero hay historia que las interpretan de formas distintas conforme a sus beneficios, por lo que crea un distanciamiento de lo que debería de ser una unión : el pueblo creyente en un mismo Dios.

Yo personalmente me niego a creer que hay un Dios para cada religión o que existen 20 historia de una única realidad. Por eso confío plenamente en Dios , no porque mis padres me lo hayan dicho ni porque la Iglesia me haya obligado a creer, sino porque he tenido experiencias en las que Dios me ha demostrado lo poderoso que es. Sin embargo, no creo en la Iglesia y no porque no considere que sea fundamental para la sociedad, sino porque el hombre se ha aprovechado del lugar que dispone la Iglesia para reafirmar su poder, para aprovecharse de la bondad de los fieles y , a lo largo de la historia la imagen que se ha proyectado de la Iglesia no ha sido la más beneficiosa para esta institución.

De hecho podemos ver bastantes casos en los que los curas han violado a niños, en los que el dinero que se le ofrece para ayudar a países que no están desarrollados han sido invertidos en otras cosas y en los que el cura/pastor obliga a sus fieles a colaborar en los gastos que genera el mantenimiento de la Iglesia, algo totalmente contradictorio a lo que dice la palabra de Dios. ¿Qué no podemos generalizar? Por supuesto que NO. Es más, el resto de Iglesias y de cargos religiosos son los primeros que condenan este tipo de hechos, porque alejan a las personas que tienen dudas sobre su fe para que dejen de creer en Dios, es decir, "le quitan la posibilidad a esas personas de poder salvarse". Podemos encontrar el testimonio del Papa Francisco que dice: "Hay 2 cosas que el pueblo no puede perdonar: a un sacerdote apegado al dinero y a un sacerdote que maltrata a la gente".

Ya no sólo está el debate entre religiones, sino que también dentro de una misma religión podemos encontrarnos con el siguiente: "si no vas a la Iglesia, no eres buen cristiano". Probablemente muchos de vosotros lo habéis escuchado más de una vez o habéis sentido que sois raros o que no sois del todo buenos cristianos. Para responder a estos comentarios me gustaría responder aludiendo a una de las frases del Papa Francisco: "De nada te sirve ir a la Iglesia y servir a Dios, si llegando a tu casa juzgas, criticas y hablas de los demás. No seas hipócrita".

Seguramente esa persona que no va a la Iglesia cree en Dios igual o más que otra persona que va todos los días, de hecho Jesús no tenía una Iglesia y los apóstoles predicaban por todos lados, porque Dios está en cualquier lado. Probablemente aquella persona que no va ora todos los días, tiene buen comportamiento, es buen padre/madre, hermano/hermana, hijo/hija y ayuda a aquel que lo necesita. Alomejor aquella persona que va todos los días es bellísima por dentro , pero también hay muchos casos en los que ven a alguien pidiendo limosna y ni si quiera les miran, o juzgan creyéndose que están en la postura correcta y que todos sus errores son insignificantes porque luego van a la Iglesia y Dios les perdonan.

Con esto quiero llegar a la siguiente conclusión: Nadie es más que nadie. No es obligatorio ir a la Iglesia para ser buen cristiano o buen hijo de Dios, al igual que tampoco se debería de quitar la Iglesia por culpa de aquellas personas que manchan su imagen. Bastaría con que cada uno de nosotros hagamos nuestro camino sin mirar al de lado, y mucho menos creer que nuestra postura es la correcta y que el otro está equivocado. Como humanos vamos a cometer muchos errores, lo que importa es el arrepentimiento, la bondad, el corazón, y no el justificar la Iglesia como el medio para eliminar tu mala intención.

Otras personas consideran que "no se puede ser cristiano sin Iglesia; es un absurdo". Y tú, ¿qué opinas?.

Un saludo blogueros!.